Hace 25 años...

Hace 25 años Bilbao sufrió las peores inundaciones de su historia.
En plena Aste Nagusia y con la fiesta en las calles nadie pudo imaginar la magnitud de la catástrofe.
Fue muy duro.
El Nervión se desparramo de su cauce y arraso con todo.




El Casco Viejo fue verdaderamente castigado y también los pueblos colindantes al cauce del Nervión.
Erandio, Baracaldo, Lamiako, Getxo, Portugalete, Santurce fueron también víctimas de la riada.
Todos lo sufrimos. Gernika, Llodio, Basauri, Galdakao, Amorebieta, Bermeo, Arrigorriaga...

Yo tenia 13 años y recuerdo como el Gobelas llego hasta las mismísimas puertas de nuestra casa. La gente ayudaba a los demás sin importarle su procedencia o afiliación y se demostró que, a veces, por muy duro que esto suene, las catástrofes hacen sacar a las personas lo mejor de si mismos en beneficio de los otros.
Los vecinos ayudando a retirar la basura de las calles y comercios, las autoridades implicadas de lleno y las fuerzas de seguridad del estado (Guardia Civil y Policía Nacional e incluso el Ejercito) ayudando a las gentes de los pueblos sin miedo a lo que se vivía en aquellos días. Los gestos de solidaridad fueron muchos en toda la geografía vasca.
Recuerdo esos duros años en los que, día si, día no, los periódicos nos hablaban de una guerra abierta y sin cuartel.

Me quedo con el sentimiento de solidaridad y apoyo de todos para que todo volviera a la normalidad y con el sentimiento de que todos unidos somos mas fuertes.
Aquello desgraciadamente fue solo un espejismo que duro lo que se tardo en limpiar las calles y pueblos de Euskadi. Pero lo que se vio aquellos días demuestra como somos capaces de lo mejor, y también de lo peor.
Bilbao y toda Vizcaya, pasaron, quizás las peores horas de su historia.

Unos datos para la memoria.
34 fallecidos y 5 desaparecidos.
60.000 millones de perdidas en Bilbao y 200.000 millones en Euskadi.
Zona catastrófica en mas de cien municipios de Euskadi, Cantabria, Navarra y Burgos.
El agua supero los 5 metros en algunas zonas de Bilbao.
Ese día cayeron 600 litros por metro cuadrado.


Un recuerdo sentido a los que perdieron su vida, a los que perdieron sus comercios y hogares, a los que ayudaron en tareas de limpieza, y a los muchos que se dieron cuenta que era mas lo que nos unía que lo que nos separaba.
A todos ellos un homenaje y un recuerdo.

Pasaros por este link para mas información de la catástrofe por El Correo, con imágenes y crónicas de esos dolorosos días.
Muy interesante hacer un paseo por las noticias sobre el suceso y mirar detenidamente los artículos para conocer lo que supuso las inundaciones del 83, la mayor catástrofe ocurrida en Euskadi en siglos.



Muxus eta Agur