Tomahawkeando humanitariamente

Robert Garcia


Las bienaventuradas democracias occidentales ya están en otra batalla genocida y derrochadora.
Los tambores de la guerra ya suenan en su máximo esplendor y lo que era una guerra de supervivencia de un régimen angustiado se va a convertir en una cascada de proyectiles inteligentes, que así los llaman los muy bestias, de esos que se dirigen desde una consola, casi como una playstation.

Peor el remedio que la enfermedad.

La coalición es la de siempre. USA y Gran Bretaña, y los demás, un poco a regañadientes por que no hay que enfadar al jefe. Eso si, hay un actor inesperado que se ha colado de forma bruta y violenta. El Sr Sarkozy, el honorable primer ministro francés, un hombre de talla corta y miras estrechas, el paladín de la democracia exquisita o a la francesa. Que tío, que afán de protagonismo. ¿No sera que esta en barrena en las encuestas? y, ya sabéis, no hay nada mejor para levantar las expectativas electorales que una guerra televisada, para sacar pecho,y de paso silenciar la amenaza de Gadafi de airear una buena colección de trapos sucios sobre la financiación de su campaña electoral. Eso si, todo por el bien de l@s ciudadan@s libi@s, por supuesto, que mal pensados que somos.






¿Y Gadafi? ¿Donde están sus amigos?
¿Esos que hasta hace bien poco le reían sus chistes a cambio de contratos de gas y petróleo?

Pues todos se han convertido en humanistas radicales, en cuidadores de los derechos de los pueblos, en garantes de la libertad y la democracia, en paladines de la justicia universal.
Venga ya. A mi no me la pegan. Ni a ti tampoco te la deberían pegar.
Estos están en lo mismo de siempre.
Petroleo y Gas.


Ilustra Umpierrez




Hilary desempolvando arsenal obsoleto y limpiando armamento que se estaba oxidando, además de montando otro marrón muy al gusto neocom, pero esta vez de bajo perfil.
Cameron creyéndose el estratega que no es y manejando un perfil político lejos de su ambiguedad y antipatia.
Y Sarkozy, el bonaparte, el cowboy a la francoise, que se empeña en los bombardeos olvidando que la pequeña de Le Pen y sus acólitos se hacen cada vez mas fuertes a costa de racismo, desigualdad y guetos. No olvidemos las expulsiones ilegales de los Gitanos hace bien poquito, por citar algo de dominio publico.

Y ZP. Pues sin ruido pero con la causa como buen compadre. Ya ha prometido unos cuantos F18, de esos que cuestan un año de pagos a los desempleados, y unos cuantos soldaditos y demás baratijas, todo en el recibo de todos los contribuyentes, claro.

Gadafi no es de mi agrado. Nunca lo fue. Siempre me pareció un déspota, un tirano corrupto, y además un tipejo infumable desde cualquier punto de vista.
Sin embargo no podemos obviar el contexto político de sus mas de 40 años en el poder y debemos preguntarnos porque ahora no interesa Gadafi.
El pueblo Libio debe hacerse cargo de su cadáver político y de su destino físico.
No a la injerencia extranjera. Muchos paises ya lo reclaman.

Nadie, ningun pais debe hacer de policía o gendarme y bombardear otro país por que un tirano lo subyuga.
Si no la cuenta seria para pelar patatas y no parar. La lista seria interminable.

¿Donde empezarías la limpieza? Cada uno que se mire en su propia casa y luego responda.
Yo lo tengo claro pero me lo voy a callar que si no nunca terminaria esta entrada.

Pues nada amigos. Que siga la parodia, la pantomima, el esperpento.
Que sigan bombardeando a diestro y siniestro. Total si ya lo hacían entre ellos pues nada, nos unimos al festejo.
Mientras en Libia la gente solo quiere vivir. Y en Marruecos, en Yemen, en Bahrein, en Emiratos, en Arabia Saudi, en Catar, en Palestina...


Paz en Libia, Ya.


Para terminar os dejo con este ilustrativo reportaje sobre la corrupción política en la entrañas de la Unión Europea. No os lo perdais.
Hay si yo tuviera una escoba...

Tres eurodiputados, pillados in fraganti mientras apalabraban favores con asesores de empresas deseosas de influir en leyes que afectan a 500 millones de ciudadanos europeos.


Besos y Paz